Opciones De Tratamiento Para La Ambliopía (Ojo Vago)

La causa más común de discapacidad visual entre los niños pequeños, es la ambliopía que afecta a bebés, niños pequeños, niños en edad preescolar y de primaria. También conocida como "ojo vago", la condición ocurre cuando un ojo no funciona correctamente con el cerebro, lo que resulta en una reducción de la agudeza visual en el ojo afectado.

También es correcto describir la ambliopía como un trastorno del desarrollo de la visión que ocurre cuando el cerebro favorece un ojo bloqueando o ignorando las imágenes que se envían desde el otro ojo. Cuando se permite que este proceso persista, es mucho menos probable que el ojo afectado desarrolle una visión normal y saludable.

Afortunadamente, la ambliopía es relativamente fácil de diagnosticar en un examen ocular pediátrico de rutina. Aún mejor, cuando se detecta temprano y se trata de inmediato, casi siempre se puede corregir. Esto es lo que debe saber.

Causas comunes de ambliopía

Cuando un ojo no funciona correctamente con el cerebro (o el cerebro prefiere un ojo sobre el otro), el ojo afectado no puede lograr una agudeza visual normal, incluso con lentes recetados.

La ambliopía suele ser el resultado de una interferencia temprana y continua con la visión clara en un ojo.

El estrabismo, o la desalineación de uno o ambos ojos de su hijo, es una causa común de ambliopía. Ocurre cuando un ojo se desplaza hacia arriba, hacia abajo, hacia adentro o hacia afuera mientras el otro ojo enfoca un objeto.

Una catarata (opacidad del cristalino) es otra posible causa. Aunque las cataratas generalmente se asocian con cambios degenerativos en el ojo relacionados con la edad, las cataratas congénitas pueden estar presentes desde el nacimiento.

La ambliopía también puede desarrollarse cuando un ojo es más miope, hipermétrope o tiene un mayor grado de astigmatismo que el otro ojo. Cuando un ojo no puede enfocar tan bien como el otro, el cerebro tiende a ignorar las imágenes borrosas y concentrarse en las claras.

Tratamientos para la ambliopía

El tratamiento de la ambliopía implica inicialmente obligar a su hijo a usar el ojo con una visión más débil o borrosa. Esto generalmente se hace de una de dos maneras:

Terapia de parches

Con el parche en el ojo, su hijo usa un parche adhesivo sobre el ojo afectado durante varias horas todos los días durante un número predeterminado de semanas o meses. Si bien puede ser simple, la terapia con parches es una forma muy eficaz de estimular la visión en el ojo más débil de su hijo y ayudarlo a establecer una mejor conexión con su cerebro.

Todas las formas de tratamiento de la ambliopía, incluidos los parches en los ojos, tienden a funcionar mejor y a tener más éxito cuando se implementan a una edad temprana y son más efectivos antes de los ocho años.

terapia con atropina

Si su hijo no quiere usar un parche, las gotas recetadas para los ojos que contienen un medicamento llamado atropina pueden ayudar. Se administra una gota de atropina en el ojo más fuerte para empañar temporalmente su visión, por lo que su hijo tiene que usar su ojo más débil, especialmente cuando enfoca objetos cercanos.

Las investigaciones muestran que una gota diaria de atropina en el ojo no afectado puede funcionar tan bien como la terapia con parches. Sin embargo, es importante tener en cuenta que no todos los niños son candidatos adecuados para la terapia con atropina.

Atención oftalmológica pediátrica en la que puede confiar

Un plan integral de tratamiento de la ambliopía también aborda la causa subyacente de la ambliopía para garantizar que la afección no regrese. Si el trastorno de su hijo se debe a un error de refracción significativo en un ojo, por ejemplo, es esencial usar los lentes correctores correctos, además de someterse a otras terapias.

Del mismo modo, si su hijo tiene estrabismo grave que no se puede corregir con la terapia de parches, es posible que necesite una cirugía ocular además del parche para garantizar que desarrolle una visión normal y saludable en ambos ojos.

Recuerde, a menos que la ambliopía se trate con éxito en la primera infancia, es probable que persista hasta bien entrada la edad adulta. 

programe una cita